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Haciendo esta web me surgió el dilema: pintar a Jorge como un ser perfecto o también pintarlo en toda su dimensión (subjetiva)
Jorge despertó muchas cosas en mí, muchos cambios o ratificaciones en mi forma de pensar, pero a veces también la frustración de no comprender que no sólo su camino es el correcto. 
Así como en un momento me ayudó a crecer (noches interminables hablando de ecología, rock, la vida...) y en otros parecía solo escucharse a él.
Independientemente del cariño, hubieron momentos en que pasé de amigo a enemigo, de estar en el "buen camino" a desviarme.
Pero quien (aparte de yo) es perfecto?

Hola Ralph, estuve mirando con detenimiento la pagina de "Radio Goga", realmente me fue de mucho provecho y me ayudo a comprender muchas cosas, algo vital en este momento en que estamos por lanzar la radio del Expreso Imaginario. Como en la guerra de las galaxias naves con su propia tripulación, sus propios objetivos, sus propias consignas. La nave Goga en particular, de hecho tan cargada de connotaciones bíblicas que inevitablemente la asocio con el arca de Noé, tan repleta de pasajeros de diversos plumajes que transforman intermitentemente la nave en la torre de Babel. Seria largo hacer un análisis del mega proyecto que estas encarando, creo que tiene aspectos brillantes pero en lo ideológico entiendo que continua en la linea de la Mano o Cerdos y Peces, publicaciones mas que con el Expreso siento emparentadas con el proyecto de la revista "El porteño" que editara Gabriel Levinas a partir de la incorporación de Enrique Simms, (el ángel subterráneo). Hablando de Enrique creo que seria interesante que el reportaje que me propusiste se lo hagas a el, es un momento oportuno ya que se que escribió un libro donde desarrolla su tema preferido, el de la pedofilia. Entiendo que puede ser la cuota transgresora que equilibraría al resto políticamente correcto. Bueno Ralfi, insisto en que fue una alegría muy grande el reencuentro que me confirmo que desde el fondo del pasado el amor sigue intacto, y me aferro y lo aprieto y beso la comisura de su sonrisa, tan fresca, mas allá del tiempo. 
Si tenes ganas llamame, que como cantaban los peronistas en los ochenta "un buen amigo vas a encontrar"...
...

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Editado por Resorte Hornos

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Miguel Grinberg
grinberg.jpg

En tanto la Luna enrojecía,
Jorge se despegaba de sus tercos huesos,
abría los brazos hacia el Universo
y ampliaba el campo de sus atrevimientos.
 
Lejos de la solemnidad, cara a cara con la Luz,
la infinita ráfaga de aleluyas que entonó de pie,
siempre hacia lo alto, provisto de locas osadías,
en estado de infatigable peregrinaje terrenal,
atento a las vibraciones de toda una generación,
despierto cuando todos simulaban normalidades
y reposando lo necesario para reanudar la lucha.
 
En tanto muchos observaban mansamente el cielo,
su corazón dio vuelta la página y saltó al espacio
desplegando por completo las alas de su itinerario,
no para abandonar el ritmo del imaginario expreso
que tripuló a toda hora como inalterable sembrador,
fiel y osado en medio de la multitud enceguecida.
 
No para renunciar a la batalla ni para pedir tregua,
sino para continuarla desde otro plano, ilimitado,
así como su alma lo indujo siempre, sin mirar atrás,
con el horizonte como paisaje y la vida sin miedo.
 
La imagen de la Luna fue diluyéndose en lo alto,
vaticinando épocas de conmoción y revelaciones.
 
Él supo dónde se alojaban las mejores profecías.
Él diseminó certidumbres con generosidad extrema.
Él supo delimitar el camino hacia la clarificación
de las prioridades y el ejercicio de los poderes.
Él, simplemente, sigue planificando conspiraciones.
Allí va: despierto para siempre, de paseo, sonriendo.

Conocí a Jorge Pistocchi cuando él metía alma y dinero en llevar adelante la experiencia luminosa de "Almendra". Hacia 1971, en su dpto. de la Calle Viamonte, con un grupo de amigos músicos y poetas (Luis Alberto Spinetta, Emilio del Guercio, Rodolfo García, Hugo Tabachnik, entre otros) comenzamos a reflexionar sobre la experiencia humana en el planeta Tierra. En su máquina eléctrica de escribir, tecno-novedad de la época, tipié un número entero de mi revista "Contracultura".
Después surgieron mi programa "El Son Progresivo" por Radio Municipal, los encuentros con  público de Rock en el Parque Centenario, su revista "Mordisco", los recitales de Luis con "Artaud" en el Astral, y un vértigo de otras realizaciones pioneras, como la revista "Expreso Imaginario". Otro amigo, Mario Rabey, contribuyó a crear el sello "Mandioca" (desencarnó hace pocos días y lorealizaciones pioneras, como la revista "Expreso Imaginario". Otro amigo, Mario Rabey, contribuyó a crear el sello "Mandioca" (desencarnó hace pocos días y loextrañamos). Pipo Lernoud mantuvo latente el espíritu de La Cueva...
Muchas historias confluyentes, que alguien debería documentar. Hoy, Ralph Rothschild lucha para terminar el Auditorio Goga en El Bolsón, en tanto otros siguen sembrando certidumbres en Epuyén, San Marcos Sierra, Traslasierra, Capilla del Monte, Cachi, Ushuaia, Bariloche, y demás puntos de luz. En resumen, fuimos y somos la gente que estuvimos esperando. - 

 

grinberg-jorge.jpg

Conocí a Jorge Pistocchi cuando él metía alma y dinero en llevar adelante la experiencia luminosa de "Almendra". Hacia 1971, en su dpto. de la Calle Viamonte, con un grupo de amigos músicos y poetas (Luis Alberto Spinetta, Emilio del Guercio, Rodolfo García, Hugo Tabachnik, entre otros) comenzamos a reflexionar sobre la experiencia humana en el planeta Tierra. En su máquina eléctrica de escribir, tecno-novedad de la época, tipié un número entero de mi revista "Contracultura".
Después surgieron mi programa "El Son Progresivo" por Radio Municipal, los encuentros con  público de Rock en el Parque Centenario, 
su revista "Mordisco", los recitales de Luis con "Artaud" en el Astral, y un vértigo de otras realizaciones pioneras, como la revista "Expreso

Imaginario". Otro amigo, Mario Rabey, contribuyó a crear el sello "Mandioca" (desencarnó hace pocos días y lorealizaciones pioneras, como la revista "Expreso Imaginario". Otro amigo, Mario Rabey, contribuyó a crear el sello "Mandioca" (desencarnó hace pocos días y loextrañamos). Pipo Lernoud mantuvo latente el espíritu de La Cueva...
Muchas historias confluyentes, que alguien debería documentar. Hoy, Ralph Rothschild lucha para terminar el Auditorio Goga en El Bolsón, en tanto otros siguen sembrando certidumbres en Epuyén, San Marcos Sierra, Traslasierra, Capilla del Monte, Cachi, Ushuaia, Bariloche, y demás puntos de luz. En resumen, fuimos y somos la gente que estuvimos esperando. - 


 

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